Entre el 15 y 17 de enero se realizó la Conferencia Internacional “Registrando la Violencia Política: Tecnologías, Usos y Efectos”, en el Museo de la Memoria y los Derechos Humanos. La actividad fue organizada por el Programa de Investigación Interdisciplinar en Memoria y Derechos Humanos de la Universidad Alberto Hurtado, en el cual participan académicos e investigadores de cinco facultades, incluyendo la Facultad de Derecho
La conferencia tuvo el propósito de analizar, poner en diálogo y evaluar críticamente diferentes experiencias públicas y privadas de registro de episodios contemporáneos de violencia política masiva, sus tecnologías, usos y efectos en las sociedades.
Esta es la principal actividad pública de “Tecnologías Políticas de la memoria: una genealogía de los dispositivos de registro y denuncia de las violaciones a los derechos humanos por la dictadura militar en Chile (1973-2013)”, un proyecto de investigación de tres años, financiado por Conicyt y el Fondo Newton; y desarrollado con la colaboración de académicos del Latin American Centre de la Universidad de Oxford. Además contó con el patrocinio de Amnistía Internacional, Museo de la Memoria y los Derechos Humanos, Subsecretaría de Derechos Humanos de Chile, Fundación Documentación y Archivo de la Vicaría de la Solidaridad, Memoria Abierta Argentina, Núcleo de Estudios sobre Memoria Argentina, Mundo(s) de Víctimas, Fundación de Protección a la Infancia Dañada por los Estados de Emergencia, y Red Latino-Americana de Justiça de Transição, Brasil.
“Documentar lo ocurrido y a quiénes le ocurrió, en episodios de violencia política, es clave para el recuento histórico, la información y la reflexión social, el desarrollo de una cultura pacífica, el establecimiento de las medidas y condiciones necesarias para la no repetición y de prácticas de denuncia y asistencia de la violencia política en adelante”, señaló Elizabeth Lira, Premio Nacional de Humanidades y Ciencias Sociales 2017 y Decana de la Facultad de Psicología de la Universidad Alberto Hurtado. Para “condenar a los culpables y que las nuevas generaciones conozcan en detalle lo sucedido, necesitamos recolectar, estudiar y reflexionar sobre las evidencias”, acotó Hugo Rojas, Profesor de Sociología del Derecho en la Facultad de Derecho de la UAH.
“Estamos muy satisfechos de la alta convocatoria que tuvo la conferencia en la comunidad académica, de gestores y profesionales de los derechos humanos y en el mundo de los artistas visuales nuestro llamado a discutir estos temas. Recibimos 104 propuestas de 19 países y 4 continentes”, comentó Oriana Bernasconi, Profesora de Sociología UAH e investigadora responsable del proyecto.
Francisco Estévez, director del Museo de la Memoria y los Derechos Humanos reconoció la complejidad de la conferencia: “Si uno mira los paneles, estamos en un seminario de alta calidad por su conocimiento del objeto estudiado que es la memoria”, señaló. En tanto, Eduardo Silva S.J., Rector de la Universidad Alberto Hurtado indicó que “desde sus orígenes la Universidad ha puesto especial énfasis en la protección de los derechos humanos y la promoción de la justicia social”.
Concurrieron a la conferencia estudios referidos a casos de Alemania, Argentina, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Estados Unidos, España, México y Suecia. “Las ponencias refieren a distintos tipos de violencia: terrorismo de estado, violencia policial estatal, conflictos armados, guerras sucias, guerras civiles, guerras contra el narco, entre otras, y examinan el papel de diversos dispositivos de gestión de la violencia política masiva: archivos de organismos civiles de defensa de víctimas y denuncia de la violencia, comisiones de verdad, unidades de atención y reparación de víctimas, secretarías de paz o centros de memoria histórica”, señaló la profesora Bernasconi.
En el programa destacan las exposiciones de Jairo Rivas de Perú, quien comparó quince registros oficiales elaborados en distintos continentes: “Los múltiples aportes de los registros oficiales de víctimas elaborados por entidades oficiales, pueden verse también como un aporte a la memoria histórica o como evidencia sobre la magnitud y el impacto de la violencia”.
Andrés Suárez, del Centro Nacional de Memoria Histórica de Colombia, expuso sobre la realidad del conflicto armado de 50 años con grupos como las AUC y las FARC. “Esta ponencia se centra en el registro institucional de toda esta movilización de las víctimas a partir de las dos instituciones estatales: la Unidad de Atención y Reparación Integral de las Víctimas y el Centro Nacional de Memoria Histórica y su Observatorio de Memoria y Conflicto. “Dos registros, dos verdades”, sostuvo.
Adriana Villalón (de Brasil) analizó el caso de España y el País Vasco, incluyendo a la guerra civil, el franquismo, la ETA y la violencia policial estatal, preguntándose qué es lo que se gestiona en estos procesos de identificación, calificación y reparación.
En tanto México fue representado, entre otros, por Camilo Ovalle y Carlos Dorante de la Universidad Autónoma de México, quienes expusieron sobre las formas de registro de la desaparición de personas en dos momentos recientes de esa sociedad: la contrainsurgencia y la “guerra contra el narco”. En las tecnologías audiovisuales, Ángeles Donoso (City University of New York) trazó el rol de la fotografía en distintos ámbitos: revistas, documentales, murales, folletos, pancartas, etc. “El análisis contempla las fotografías de Luis Navarro en diciembre de 1979, que formaron parte de la evidencia forense en el caso Lonquén; los retratos de detenidos desaparecidos re-fotografiados y catalogados en la Vicaría y las imágenes censuradas que no aparecieron publicadas en revistas de oposición”.
Hugo Rojas y Francesca Lessa (Universidad de Oxford) expusieron los resultados de la investigación que realizaron junto a Boris Hau sobre la utilización de los archivos de la Vicaría de la Solidaridad por los jueces que han dictado sentencias de primera instancia en los casos de violaciones a los derechos humanos.