Fuente: Emol.com
Según datos del Registro Civil, entre 2000 y 2014, más de tres mil niños nacidos en Chile fueron inscritos bajo el estatus de “hijo de extranjero transeúnte”, quedando sin nacionalidad y sometidos a altos niveles de discriminación. Revista Viernes (La Segunda) revisó la realidad de estos niños, evidenciando a la vez la deuda que tiene el país con los inmigrantes.
Un grupo de abogados, integrado por juristas de las universidades Diego Portales (UDP) y Alberto Hurtado (UAH) y junto al Servicio Jesuita para Migrantes (SJM), los fueron a buscar. La gran mayoría de estos casos se encontraba en las regiones de Arica y Parinacota, y Tarapacá, hijos de peruanos o bolivianos que vivían en localidades rurales como Colchane, Pica, Huara o Pozo Almonte. Otros estaban en la Región Metropolitana. Después de dos viajes a terreno, escudriñando en escuelas y postas, consiguiendo permisos y poderes, acumularon 161 casos, que hace dos semanas fueron presentados a la Corte Suprema bajo un recurso de reclamación de nacionalidad. O sea, que el Estado los considere como chilenos.
Macarena Rodríguez, académica y directora de la Clínica Jurídica de la Facultad de Derecho UAH
«Es un recurso que se presenta directamente frente al pleno de la Corte Suprema. Por sus características, no es un recurso muy accesible: piensa que sus padres son inmigrantes y desconocen la normativa nacional.
Además imagínate conseguir un abogado que trabaje en Santiago para poder presentarse ante el máximo tribunal del país. De manera particular es imposible que ellos lo puedan hacer, no tienen ni los recursos económicos ni informativos.»