Estas últimas semanas, a partir del contexto noticioso, se ha discutido mucho sobre el refugio en Chile. Sin embargo, en el mismo debate público ha pasado un tanto desapercibida la promulgación de la Ley 21.655, que entró en vigencia el pasado martes 20 de febrero, y de la que más que nada se ha hablado sobre las modificaciones en materia de reconducciones, pero poco de los cambios en el procedimiento de reconocimiento de la condición de refugiado.
La modificación se justificó, de acuerdo al Ejecutivo, en el significativo aumento de las solicitudes de reconocimiento de la condición de refugiado. En base a los datos compartidos por el propio Servicio Nacional de Migraciones, entre los años 2010 a julio 2023 se presentaron 30.597 solicitudes. Solo 957 solicitudes terminaron exitosamente en reconocimiento, o sea, un 3.13% de las solicitudes presentadas. Venezuela concentra el 41.3% de las solicitudes y una de las tasas más bajas de reconocimiento ya que solo han sido reconocidos como refugiados 36 personas de nacionalidad venezolana.
*Columna publicada junto a Constanza Castillo